domingo, 6 de octubre de 2013

NACIONALIDAD ÉPERA

CARACTERÍSTICAS:

Idioma: Siapede (Wamuna o Epena), que significa “voz de caña brava”, y el castellano (como segunda lengua). Aproximadamente el 50% de la población es bilingüe funcional.

 Población: Su población es de aproximadamente de 300 habitantes, que conforman 80 familias y alrededor de 60 viviendas.

 Acceso: Vía Fluvial

Ubicación Territorial:

Los Épera se ubican en el Ecuador en la Costa Norte, Provincia de Esmeraldas, Cantón Eloy Alfaro, parroquias Borbón, San Francisco y Tambillo.
De acuerdo con su afinidad étnica y lingüística y sus puntos originarios de migración, se sabe que los Épera son una ramificación de los Eperara Sia (Embera), uno de los grupos indígenas que cuenta con mayor población en Colombia. En el Ecuador su presencia es tardía, producto de un proceso migratorio que se produce en 1964 desde el Chocó colombiano.
Territorio / tierras – Legalización:

El territorio ancestral de los Épera está ubicado en la Costa del Pacifico colombiano, exactamente en las riberas de los ríos Saija, Infi y Micay pertenecientes al Departamento del Cauca, poblado en su mayoría por Eperara Sia (Emberá) y en menor proporción por los Páes, que son los dos grupos étnicos mas grandes de ese país. En Ecuador el primer asentamiento oficial se realiza en 1993 en la parroquia de Borbón, con la entrega de 26 lotes en el sector de Cayapa.
En los últimos años gracias a una gestión de sus dirigentes y una cooperación nacional han logrado adquirir 150 hectáreas para su nacionalidad en forma comunal por el río Cayapas y Borbón.
 Organización Socio-política:

La base de organización social constituyen las familias ampliadas, de hasta 25 personas, aunque la tendencia es hacia la conformación de familias nucleares.
El liderazgo se mantiene sobre la base de linaje mítico-histórico, que ha devenido en parentelar, a través de un apellido (en Ecuador, los Capena), que es el detentador del bastón de mando de los Epera (Tachiakorë); su mujer que también tiene un puesto importante a su lado (Tachinawë).
Actualmente, se encuentra en aprobación el Estatuto Jurídico de la nacionalidad, el mismo que normará su vida política y jurídica. La Organización de la Nacionalidad Épera es de carácter incipiente y su estructura directiva compuesta por un Presidente, un Vicepresidente, un Secretario, un Tesorero y Cabildos (Vocales) se elige en Asamblea General. En 1990 se eligió el primer Presidente del Consejo de Gobierno de la Nacionalidad Épera.
Así mismo, la nacionalidad ha estatuido un sistema implícito de normas propias de conducta individual y colectiva, así como de normas de juzgamiento y sanción de faltas que cometan sus miembros. La Nacionalidad Épera es miembro de la CONAICE en el ámbito regional y de la CONAIE en el ámbito nacional.
 Áreas naturales protegidas y territorios:

La partida de guanta, guatusa y monos realizada por los Épera está en caída debido al aumento de la población. En cuanto a los árboles, existe una racional explotación de los bosques de las elevaciones menores de sus reservas. Estos son consumidos en la fabricación artesanal de canoas.
 Economía:

Su economía se basa en actividades artesanía y la agricultura, en pequeñas fincas familiares, en la recolección, la pesca y la caza para el autoconsumo; más enfocada hacia el mercado está la artesanía, principalmente cestería; además existe un buen número de personas que trabajan como asalariados en grandes fincas agrícolas de la zona y en empresas madereras.
Por otra parte, los jóvenes migran hacia las ciudades para dedicarse a actividades informales, por tiempos variables, y regresan a las festividades. Estas situaciones han alterado su cultura productiva y reproductiva y amenazan su identidad cultural.

Por lo general tienen cultivos de ciclo corto y largo y animales menores. La pesca la realizan con métodos ancestrales como las tres redes, veneno, dinamita, anzuelo, fisga, trampa, siendo los últimos tres los más usados. La cacería de guanta, guatusa, monos y zaínos realizada por los Épera está escaseando debido al incremento de la población y a la introducción de nuevos instrumentos de cacería.
Existe una explotación muy limitada de los bosques de las elevaciones menores de la Reserva, por parte de los Épera; algunos árboles son cortados para utilizarlos artesanalmente en la fabricación de canoas. Un gran número de plantas del bosque es utilizado para la alimentación y para la curación de algunas enfermedades; las mujeres se encargan de la recolección de alimentos silvestres.
Existe una diferenciación de género marcada en las actividades productivas; la mujer, además de asumir las actividades reproductivas y domésticas se involucra en las agrícolas (siembra) y en la pesca con canasta. Los hombres, además de someterse al régimen asalariado en las fincas, se encargan del desbroce del terreno, deshierbe así como la cosecha y comercialización; los hombres son los únicos que pueden ser jornaleros.
 Vivienda:

La luna tiñe de plata las viviendas, cubiertas por hojas secas de plátano, de esta comunidad que carece de luz eléctrica y tiene en el río Cayapas la única vía de comunicación.
 Educación:

En Santa Rosa existe la única escuela bilingüe. Hay tres profesores para 48 niños. El resto de estudiantes Épera asiste a escuelas hispanas. No existen centros de educación a distancia, radial o no presencial; sin embargo, hay la presencia ocasional de programas de alfabetización para adultos.
Salud:

No existe establecimientos de Salud en la comunidad, pero si se cuenta con parteras, varios promotores de salud y los curanderos tradicionales.
Existe un centro de salud que se encuentra en la cabecera cantonal y se encuentra a dos horas de distancia.
La Nacionalidad Épera no cuenta con un servicio de agua potable y la fuente principal de abasto del líquido vital es el río, la vertiente o acequia.

 Cultura:

Justicia propia.- Los Épera se rigen por un sistema de justicia comunitario. Una asamblea analiza los casos y determina los castigos, que se aplican desde los 12 años. Van desde trabajos comunitarios y castigos con látigo, hasta la expulsión. Si el delito es grave el caso pasa a la justicia regular.
Matrimonios a la antigua.- Las parejas que deciden unirse informan a los padres, quienes dan su aprobación. La mayoría se une desde los 14 años. Tener más hijos garantiza más tierras para trabajar.


7 comentarios: